En el 2005 le rompió el corazón a todos los hinchas que alguna vez gritamos y celebramos con el vestido de crema. Nunca jugo por otro club en el Perú, como prometió, aunque su primera aventura como técnico, fuera debajo del puente.
Hoy Chemo vuelve a la U, y no todos son felices; hay quienes dicen que el profesionalismo de ser técnico lo llevo a aceptar dirigir a Cristal. También están los que lo catalogan de traidor sin tener un fundamento válido. Lo cierto es que en la actualidad Chemo volvió a Ate; no como jugador, tampoco como hincha. V0lvió como el encargado de manejar los hilos de este plantel para repetir el plato del año pasado y regalarnos esa estrella 26 que tan bien nos quedaría.
Chemo volvió a la U. Esperamos que no se vaya nunca más.
